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Creando Canarias se configura como una corriente de opinión, como un espacio de acción y reflexión social, política, económica y cultural. Desde este espacio queremos impulsar y abrir debates junto a la gente. Favorecer un marco de reflexión y pensamiento libre que promueva una participación crítica y transformadora desde nuestra realidad canaria. Nos proponemos avanzar en la idea de que el conocimiento y la participación son las mejores herramientas para la liberación de los pueblos y la transformación social. ‘Creando’ porque es un gerundio y, como tal, refleja la acción no en su inicio ni en su término sino en su desarrollo, y ‘Canarias’ porque es nuestro contexto, nuestro lugar.
La conquista castellana empezó, como es bien conocido, en la isla de Gran Canaria. Los que probablemente no son tan conocidos son los motivos que condujeron a estos hechos. En el siglo XV la isla estaba totalmente habitada por machos, de origen bereber, que, debido a un extraño comportamiento de desviación sexual, cuyo origen según Torriani era la absoluta falta de actividad volcánica en la isla, cayeron fascinados por las brillantes armaduras y el adorable olor a esmegma de los castellanos. Así empezó el idilio entre los enamoradizos nativos y los astutos, aunque viciosillos, invasores. Las fuentes indican que la conquista de Tenerife se fraguó en las costas del poblado de Laguete entre copas de vino riojano y truchas de color verde que nacían en los charcos de la isla. Pescados extraños de grandes pestañas y cuyos cabozos nacían, siempre según Torriani, por parteriogénesis, pescaditos de la Virgen del Pino, como fueron bautizados posteriormente por Viera y Clavijo. El Almirante Berasategui, sangriento conquistador vasco, aunque recientemente se ha demostrado que fue adoptado por un matrimonio euskaldún y su verdadero origen era un pueblo de Sevilla, zarpó del puerto con Bentejuí como traductor y mediador entre nativos y castellanos. Al llegar a las costas de Tenerife, cuando la reunión con Benchomo había comenzado, Bentejuí notó un temblor en su culo que le hizo arrepentirse de su camino sodomita y clavándole un anacronista naife al Almirante Berasategui se tiró de un acantilado de Anaga gritando: ”Aañañac aguaró franceschoc añañac”, que significa “Me la clavaste, francés, esta piedra resbala”. Así comenzó la lucha y la primera victoria de los guanches en las tierras de Tenerife, en los acantilados de Anaga. Aún hoy se escuchan los ecos de Bentejuí llorando su deshonra y la respuesta del Almirante: ”Y lo bien que lo pasamos, truhán”.
Chowie, para Creando Canarias.
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Creando Canarias se configura como una corriente de opinión, como un espacio de acción y reflexión social, política, económica y cultural. Desde este espacio queremos impulsar y abrir debates junto a la gente. Favorecer un marco de reflexión y pensamiento libre que promueva una participación crítica y transformadora desde nuestra realidad canaria. Nos proponemos avanzar en la idea de que el conocimiento y la participación son las mejores herramientas para la liberación de los pueblos y la transformación social. ‘Creando’ porque es un gerundio y, como tal, refleja la acción no en su inicio ni en su término sino en su desarrollo, y ‘Canarias’ porque es nuestro contexto, nuestro lugar.
Conozco a Chowie hace años y no es en absoluto homófobo. Soy gay y es de las personas más respetuosas y gay friendly que conozco. No hay más que ir a uno de sus conciertos en el Yumbo. Es un artículo de humor y aunque alguien que no lo conozca pueda pensar que es homófobo, de verdad que no debe tomarlo así. Honestamente.
Es un magnifico relato, con la misma veracidad histórica q lo q yo estudié en mi BUP.Seguro q mis chicos empollarian con mas gusto y retendrían mejor el aañañac q otras absurdeces!! Gracias